Tu mirada y semblante siempre de seriedad.
Tu nivel musical.
El color de tu piel.
Tu gusto por la lectura.
Tu forma de besar.
La pasión para hacer las cosas.
Ese aire de arrogancia y seguridad.
La seguridad con la que defiendes todo aquello en lo que crees.
Tu sentido del humor.
Tus camisetas de grupos musicales.
Tu forma de escucharme y mostrar interés en mi.
La manera casi perfecta de lidiar con mis estados de ánimo y trastornos.
La forma perfecta de ignorarme.
Tus pensamientos tan cuadrados.
Tu poca capacidad para hablar de tus sentimientos.
Tus zapatos negros con blanco.
La forma tan prepotente de tratar en ocasiones a ciertas personas.
Esas ganas de ocultar sin ceder o cesar tus debilidades.
Tu camisetas amrican eagle.
Esas ganas de no respetar mi inteligencia.
Sólo espero que el tiempo como la nieve cuando empieza a desaparecer, ese lado izquierdo empiece a dejar de importar.